En el coaching, la ambición sin un plan estructurado es solo un deseo. Por eso utilizamos modelos probados, siendo el Modelo GROW uno de los más populares y efectivos. Este marco garantiza que el proceso sea sistemático, enfocado y orientado a resultados.
GROW es un acrónimo de cuatro fases de la sesión de coaching:
G (Goal/Meta): ¿Qué quieres lograr? Definimos el objetivo de forma específica, medible y ambiciosa (el Qué). Ej: Lograr el ascenso antes de fin de año.
R (Reality/Realidad): ¿Dónde estás ahora? Exploramos la situación actual sin juicio. ¿Qué has intentado? ¿Qué te frena? (el Dónde). Ej: Me falta delegar mejor y tengo miedo a hablar con mi jefe.
O (Options/Opciones): ¿Qué podrías hacer? Generamos una lluvia de ideas sin límites, incluso las más locas, para luego seleccionar las viables (el Cómo). Ej: Pedir feedback, hacer un curso de delegación, buscar un mentor.
W (Will/Way Forward/Voluntad): ¿Qué harás? Convertimos las opciones en un compromiso y un plan de acción concreto. ¿Cuándo? ¿Quién tiene que saberlo? (el Cuándo y Cómo). Ej: Agenda reunión de feedback el próximo lunes.
El modelo GROW convierte el caos de un objetivo difuso en una hoja de ruta clara, haciendo que tus sueños sean alcanzables.